Las unidades uno y dos de la hidroeléctrica colombiana de Ituango (noroeste), una de las obras energéticas más importantes de América Latina, entraron este miércoles en operación comercial.

"Las unidades 1 y 2 de Hidroituango entraron en operación comercial, cumpliendo la Resolución CREG 194/20. No obstante, dando cumplimiento a la Resol. 1056/22 de la UNGRD (Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres), sólo se podrá generar de manera continua cuando se realicen las evacuaciones preventivas", señaló el conglomerado de Empresas Públicas de Medellín (EPM) en Twitter.

La resolución de la Comisión de Regulación de Energía y Gas (Creg) a la que se refiere EPM señala que si Hidroituango no entraba en operación este miércoles, la compañía deberá pagar una millonaria sanción por no generar energía.

"Hoy 30 de Noviembre a las 7:45AM y faltando tan sólo 15 minutos para cerrarse el mercado de ofertas Hidroituango entró en operación. Todo lo que pasó antes merece que se escriba un libro. Contra todas las variables se logró. Un equipo maravilloso lo hizo posible", escribió el alcalde de Medellín, Daniel Quintero, en Twitter.

La hidroeléctrica

Cuando esté con sus ocho turbinas funcionando, Hidroituango tendrá una capacidad instalada de generación de 2.400 megavatios, equivalente al 17 % de la demanda de energía que tiene el país.

Los constructores de la obra confiaban en que este miércoles pueda entrar en operación la primera turbina de la presa que se levanta en el cañón de un macizo montañoso en la localidad de Ituango.

La obra comenzó en 2010 y debía estar concluida en 2018 pero el derrumbe de un túnel de desviación del río Cauca ese año obligó a los constructores a inundar la sala de máquinas, que estaba casi terminada, para evitar que el agua destruyera el muro de la presa que entonces estaba en construcción y provocando la evacuación de miles de personas que vivían en el valle.

Esta megaobra no ha estado exenta de oposición, pues las comunidades de su alrededor, junto a organizaciones de la sociedad civil, han denunciado que la construcción de Hidroituango ha vulnerado derechos humanos, provocando desplazamientos de campesinos, e impactando la biodiversidad de la zona.

El pasado 5 de noviembre el Gobierno anunció que unas cinco mil personas que viven en el corregimiento de Puerto Valdivia, en el departamento colombiano de Antioquia (noroeste), serán evacuadas ante la inminente puesta en marcha de Hidroituango.

Sin embargo, esto aún no ha ocurrido y por eso no han sido encendidas las turbinas del proyecto. Los encargados de Hidroituango prevén que esto suceda la próxima semana.

EFE